Nos hemos puesto en marcha a las 07h30 y nuestra primera parada ha sido el Monte Tabor, donde se encuentra la iglesia de la Transfiguración. Hemos subido en furgonetas de 10 plazas, porque el bus no podía subir por aquella carretera llena de curvas.
Una vez allí, hemos admirado el conjunto monumental y hemos leído unas lecturas y hemos hecho muchísimas fotos.
De allí nos hemos dirigido a Jericó, a ver el árbol sicomoro de Zaqueo, y hemos aprovechado a comprar dátiles, que estaban muy bien de precio, y nos han llevado a comer a un restaurante buffet.
Hemos continuado viaje hacia Qumran, lugar donde se estableció una comunidad esenia y donde se encontraron los Rollos del Mar Muerto. Y de allí, ¡al Mar Muerto!, a pegarnos un bañito y a comprobar si era verdad lo de que no te hundes..... y es cierto, flotas como sí llevaras un flotador bajo el cuerpo. La sensación es muy peculiar.
A las 16h00 hemos celebrado una misa en Betania, junto a la Casa de Marta y María. Hemos aprovechado a hacer unas compritas, y de ahí rumbo ya a Jerusalén.
Hemos llegado sobre las 18h00 y nos han dado las habitaciones para descargar el equipaje y a las 18h30 nos hemos ido a cenar, porque a las 20h00 hemos empezado una excursión nocturna por la ciudad.
La ciudad iluminada es espectacular. Primero hemos subido a un mirador tras el hotel King David y hemos hecho un pequeño "botellón", un brindis con el grupo con vino de Caná, y hemos seguido paseando por la ciudad hasta el mismísimo Muro de las Lamentaciones. La excursión ha durado casi 3 horas, y nos ha dejado con muy buen sabor de boca y con ganas de que llegue mañana para comernos está fantástica ciudad...
El resto de las fotos, en el álbum que estamos preparando ;-)
Yo no dormí de las emociones que se me agolpaban en la cabeza pero no ha sido un problema otro día con el arrollador Marcelo y el genio y figura de Elí. Fernando al quite y el P. Aisa metiendo todas por la escuadra del corazón.
ResponderEliminarMenudo día también.